Un hombre que ya carga con una condena por violencia de género fue acusado nuevamente, pero por haber amenazado con un arma a su exmujer y abusado sexualmente de una niña de su familia. Pese al antecedente y la grave imputación, se le aplicó una restricción de acercamiento (perimetral) a menos de 200 metros de sus víctimas. La fiscal Valeria Panozzo acusó a R.J.M –según sus iniciales– por haber amenazado con matar a su expareja y abusar sexualmente de una niña de su entorno familiar.
Requirió que se le imponga la prohibición de acercamiento hacia la mujer y la niña a menos de 200 metros, así como también todo tipo de actos de perturbación o violencia. El juez de garantías Juan Manuel Kees dio por formulados los cargos por ambas víctimas y fijó un plazo de investigación de cuatro meses. Además, hizo lugar a las medidas cautelares requeridas por la fiscalía.
Según la teoría del caso que investiga la fiscalía, el hecho ocurrió el 25 de marzo de este año, aproximadamente a las cinco de la tarde, en la ciudad de Neuquén. El imputado fue hasta la vivienda de su expareja con un arma de fuego. La mujer, al verlo, se resguardó en su domicilio. En el exterior del lugar se encontraban trabajadoras del Ministerio de Trabajo y Desarrollo Social, por lo que el acusado apuntó con el arma a una de ellas y les dijo que mataría a la mujer.
Con este hecho, además, desobedeció una orden impuesta el 7 de marzo de 2024 por un juez de Familia, por el término de 90 días, en la que se le prohibió ejercer actos de agresión, perturbación, intimidación o violencia directa o indirecta, como así también la prohibición de acercamiento a 200 metros de la mujer.
Asimismo, la fiscal le atribuyó el haber abusado sexualmente de una niña perteneciente a su entorno familiar entre agosto y octubre de 2023, en una vivienda en la que vivía el imputado, en al menos 3 oportunidades.
El varón quedó imputado por los delitos de amenazas agravadas por el uso de arma en concurso ideal con desobediencia de una orden judicial. En relación a la niña la fiscalía le atribuyó abuso sexual con acceso carnal, agravado por la guarda, el vínculo y la convivencia. La fiscal explicó que en el 2021 R.J.M fue condenado a una pena de dos años de ejecución condicional por lesiones y amenazas en contexto de violencia de género, con el cumplimiento de reglas de conductas. Informó que a partir del vencimiento de la condena comenzaron los nuevos hechos de violencia.
FUENTE: Minuto Neuquen