¿Quién es József Szájer, el eurodiputado de Orbán detenido durante una orgía en Bruselas?

La Policía belga desalojó ayer un bar del centro de Bruselas donde se habían reunido 25 hombres, dispuestos a consumir drogas y a celebrar una orgía a pesar de las restricciones impuestas por el Covid-19. De no ser por el tiempo en el que se ha producido, con un país abrasado por la pandemia y que ha tenido que tomar duras medidas para frenar los contagios, la historia casi parecería una de esas anécdotas que atraen la atención de los lectores durante unos días, pero que no van a más. Sin embargo, los participantes en la celebración, entre los que figuraban un eurodiputado húngaro y varios diplomáticos, han convertido esa posible indiferencia en un aténtico escándalo.

Como se supo ayer, József Szájer, de 59 años, miembro del partido ultraconservador Fidesz, al que pertenece el primer ministro de Hungría, Víktor Orbán, fue el invitado más célebre de ese encuentro ilegal, interrumpido por las fuerzas del orden. En su mochila, que requisó la Policía, se encontraron pastillas de éxtasis, que Szájer negó haber consumido. Sus manos estaban heridas, pues había intentado escapar deslizándose por unas cañerías. En el momento de ser reprendido, se refirió a su condición como eurodiputado, lo que hizo saltar todas las alarmas.

«Lamento haber roto las reglas del confinamiento, fue irresponsable por mi parte, y aceptaré las sanciones que resulten», afirmó Szájer, resignado, dimitiendo tras la polémica. Por su parte, la Policía resumió su intervención con laconismo: «Interrumpimos un gang bang».

Conocido en Hungría

El rostro de Szájer es muy conocido en Hungría, donde figura como un estrecho colaborador de Orbán. Casado con una jueza del Tribunal Constitucional, el político fue uno de los responsables de la redacción de la Constitución de 2011, que imponía cortapisas a los derechos de los homosexuales. Por ejemplo, vetaba la posibilidad de sus bodas, al deteminar que el matrimonio debía ser la unión entre un hombre y una mujer. En ese sentido, la organización humanitaria Amnistía Internacional denuncia que Hungría es uno de los países europeos responsable de la violación de derechos de la comunidad LGTBI.

Por su parte, David Manzheley, de 29 años, el anfitrión del encuentro, refirió a la prensa que la fiesta se celebró a condición de que nadie presentara síntomas de Covid-19, explicando la naturaleza de las veladas: «Siempre invito a mis fiestas a algunos amigos, que luego traen a otros y nos lo pasamos bien juntos. Hablamos un poco, bebemos algo, como en un café. La única diferencia es que mientras tanto también tenemos sexo unos con otros. No veo nada de malo en ello».

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Fuente: ABC