El hombre del que muchos sospechan que es Q tomó la palabra en una diminuta sala de reuniones en un lujoso resort aquí en Phoenix y se dispuso a dar lo que solo puede describirse como un sermón, incomprensible para los no iniciados. «Llorar y pensar en como podríamos haber cambiado el pasado no es una forma útil de pasar el día, tendríamos más suerte y mejores resultados si aprendemos de los errores del pasado, y usamos esos conocimientos para el presente, escribiendo un futuro mejor para todos nosotros», dijo James Arthur Watkins, de 56 años, con una voz beatífica en la que habló de Mao, Stalin, Hitler, Israel, la carrera espacial, el muro de Berlín, Genghis Khan, Magallanes, Colón
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Fuente: ABC