Pompeo visita Brasil con la vista puesta en Venezuela

El hombre más importante de la diplomacia estadounidense, el secretario de Estado, Mike Pompeo, visitó Brasil el viernes con la mira puesta en Venezuela. El norteamericano llegó a la ciudad brasileña de Boa Vista, en la frontera con Venezuela para visitar los albergues de refugiados que huyen de la crisis humanitaria en ese país y del Gobierno de Nicolás Maduro, además de unirse a los países vecinos con posiciones contra el régimen bolivariano.

«El secretario Pompeo resaltará la importancia del apoyo de Estados Unidos y de Brasil al pueblo venezolano en su momento de necesidad, visitando inmigrantes venezolanos que huyen del desastre provocado por el hombre en Venezuela», informó la embajada estadounidense en Brasil.

Pompeo fue recibido por el canciller brasileño, Ernesto Araujo, en Boa Vista, capital del estado brasileño de Roraima y principal punto de entrada a Brasil de refugiados venezolanos. La visita, sin embargo, generó críticas entre los críticos del Gobierno brasileño que consideran a Araujo y al presidente Jair Bolsonaro, serviles con el mandatario estadounidense Donald Trump.

El presidente del Congreso brasileño, Rodrigo Maia, por ejemplo, criticó la presencia de Pompeo en Roraima a 45 días de las elecciones presidenciales de Estados Unidos. «Es contra las tradiciones de autonomía y orgullo de nuestras políticas exteriores y de defensa», reclamó en una nota, resaltando que Brasil orienta sus relaciones internacionales con base en los principios de independencia, autodeterminación de los pueblos, no intervención y defensa de la paz.

Pese a decir que Venezuela no está en su agenda, Pompeo llegó a decir que Estados Unidos «sacará» a Nicolás Maduro de la presidencia de Venezuela, y en un acto simbólico se reunió con una familia venezolana formada por nueve miembros, que está hace diez meses en Brasil, huyendo de la crisis humanitaria en su país.

«Estoy muy feliz de que mi familia haya sido la escogida para este encuentro», declaró Gerardo Anatrella, de 52 años, al diario Folha de Boa Vista, sobre el encuentro que fue organizado en conjunto con la Agencia de la ONU para refugiados (ACNUR) y la Fuerza Tarea que recibe a los inmigrantes venezolanos que llegan a Brasil por esa frontera.

La frontera entre Brasil y Venezuela está cerrada hace seis meses y el número de refugiados que se arriesgan a cruzarla ha disminuido incluso por el coronavirus. La visita de Pompeo coincide con una presión mayor de Estados Unidos al Gobierno de Maduro, cuando se acercan las elecciones presidenciales, en lo que puede ser un mensaje a la comunidad hispánica.

El mensaje estaría dirigido especialmente a Florida, donde reside la mayor comunidad de exiliados venezolanos, alrededor de 200 mil, y estado clave en las elecciones norteamericanas, que están apretadas entre Trump y su rival demócrata Joe Biden.

El gobernador de Roraima, Antonio Denarium, informó que Estados Unidos invirtió US$ 50 millones en su estado para apoyar el refugio de venezolanos y ayudar a enfrentar la crisis humanitaria.

Vecinos de Venezuela

Surinam fue la primera parada de Pompeo que incluye en su gira, Guyana y Colombia, además de Brasil. Es la primera vez que un alto funcionario norteamericano visita Guyana y Surinam, justo en el momento en que ambos países acaban de renovar sus Gobiernos. En Guyana, Pompeo llegó un mes y medio después de la investidura del presidente, Irfaan Ali. En Surinam se reunió con el presidente recién electo, Chan Santokhi.

Observadores internacionales ven en la visita una estrategia de Trump para acorralar a Maduro. Trump y Pompeo estarían apostando en el nuevo Gobierno de Guyana y en el alineamiento de esos países a su política contra la Venezuela Chavista. El secretario sigue viaje a Bogotá, donde debe reunirse con el presidente de Colombia, Ivan Duque.

Malestar con China

La visita de Pompeo creó también malestar en la diplomacia china, en un momento que el país viene siendo blanco del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, censurando las redes sociales de ese país, Tik Tok e We Chat, en territorio norteamericano.

En su visita a Surinam el secretario de Estado norteamericano acusó a las empresas chinas de prácticas desleales en el comercio.

«Vimos al Partido Comunista Chino invertir en países, y todo parece buenísimo en la fachada, pero se desmorona cuando los costos políticos vinculados a eso, se vuelven claros», declaró Pompeo durante un encuentro con Chan Santokhi, presidente recién electo de Surinam.

El diplomático estadounidense comparó la "calidad de los productos y servicios" chinos con los de su país, y afirmó que no siempre compiten en una base justa ni igualitaria. El gobierno norteamericano ha perdido espacio en los últimos años en la región, mientras que el Gobierno de Pekín aprovechó el boom sudamericano de materias primas hasta el 2014, con grandes inversiones y estrechando lazos políticos en la región.

En una nota de prensa, la embajada china en Paramaribo informó que cualquier intento de sembrar la discordia con Surinam será un fracaso. «Le aconsejamos al señor Pompeo que respete los hechos y la verdad, a respetar los hechos y la verdad, a abandonar la arrogancia y el prejuicio y parar de difamar y difundir rumores sobre China», dice el comunicado.

Ver los comentarios
Fuente: ABC