Una pareja que raptó y torturó a un albañil y a su esposa para obligarlos a que les entreguen una cierta suma de dinero y un terreno, aceptó su responsabilidad y acordó cumplir una condena de 3 años de prisión en suspenso y reglas de conducta, entre ellas tareas comunitarias. La sentencia la dictó este miércoles el juez Lucas Yancarelli.
Este miércoles, se realizó una audiencia en la que la fiscal Paula González presentó ante un juez de Garantías el acuerdo al que arribó con la defensa de Luis Miguel Flores Tintaya y Linda Mar Cruz Escobar, acusados de los delitos de amenazas coactivas agravadas por el uso de armas en concurso real con privación ilegal de la libertad agravada por haberse cometido con violencia y amenazas, en carácter de coautores, en perjuicio de un albañil de Plottier.
La pena consensuada fue de 3 años de prisión condicional, con las siguientes reglas de conducta: no cometer nuevos delitos; fijar residencia en la Plottier y notificar cambios; no consumir estupefacientes ni abusar del consumo de alcohol; realizar presentaciones cuatrimestrales ante Población Judicializada y realizar 288 horas de tareas comunitarias no rentadas, a razón de 8 horas mensuales, en una entidad de bien público.
Para arribar al monto de la pena, las partes tuvieron en cuenta, como agravantes, las características propias del hecho y las lesiones sufridas por las víctimas. Como atenuantes, se consideró el reconocimiento de responsabilidad de los imputados y la falta de antecedentes condenatorios.
El hecho
Los hechos comenzaron el 16 de julio en horas de la tarde, cuando la víctima, un hombre que se desempeña en tareas de albañilería, se encontraba en su lugar de trabajo. Allí lo pasó a buscar el contratista para el que trabajaba, que le facilitaba una habitación para que viviera junto a su pareja y sus hijos.
Más tarde, sin que la víctima pueda precisar el momento en concreto, Luis Miguel Flores Tintaya detuvo la marcha del auto para que subiera otra persona.
La persona que había subido al vehículo, llamada Linda Mar Cruz Escobar, es la pareja del imputado. Juntos llevaron a la víctima a la casa en la que le permitían vivir junto a su familia y, una vez allí, le exigieron a su pareja que saliera de la habitación y la ataron a una silla. Con la mujer inmovilizada, continuaron golpeando al varón y lo lesionaron utilizando herramientas y un cuchillo caliente, siempre con la exigencia de que les entregara dinero. Recién cuando accedieron a entregar un terreno que poseen en Plottier, les permitieron irse del lugar y refugiarse en la casa de familiares en Neuquén.
FUENTE: Minuto Neuquen