Netanyahu recibe a Biden con una nueva expansión de colonias

Benjamín Netanyahu está en campaña de cara a las elecciones de marzo, las cuartas en menos de dos años, y además de intentar monopolizar el éxito de la vacunación masiva contra el coronavirus, no olvida los territorios ocupados. El primer ministro recurrió a Twitter para «anunciar que 800 nuevas viviendas serán construidas en Judea y Samaria» (el nombre bíblico de Cisjordania) y añadió que «estamos aquí para quedarnos. Seguimos construyendo en la tierra de Israel». El comunicado del líder de Likud se produjo en esta última semana de Donald Trump en la Casa Blanca y generó malestar en la oposición ya que «la Administración Biden aún no ha asumido el cargo y el Gobierno nos lleva ya a un enfrentamiento innecesario», criticó el líder de Yesh Atid, Yair Lapid.

Netanyahu se prepara para la salida de la Casa Blanca del «mejor amigo de Israel», según como definió a Trump, y retiró su foto conjunta del perfil de Twitter. La llegada de Joe Biden, defensor de la solución de los dos Estados, puede suponer que Israel no tenga la luz verde absoluta que ha tenido en los últimos cuatro años de mandato republicano, como le ocurrió durante la era Obama. El primer ministro dio la bienvenida a Biden con este gesto hacia unos colonos que están molestos desde que decidiera congelar la anexión de Cisjordania a cambio de normalizar relaciones con Emiratos Árabes Unidos (EAU). Las cuentas de escaños no le salen a Netanyahu y es consciente de que necesitará el apoyo de los ultranacionalistas si quiere formar el próximo gobierno.

El Ministerio de Asuntos Exteriores palestino condenó el nuevo anuncio y acusó a Israel de estar en una «carrera contrarreloj» para construir nuevos asentamientos antes de que Trump deje el cargo. Una opinión parecida a la de la diplomacia jordana que recordó que estas medidas complican la posibilidad de retomar el diálogo para intentar resolver el conflicto.

La ocupación avanza con cada ampliación de los asentamientos y desde la organización de derechos humanos israelí B’tselem decidieron usar la expresión «régimen de Apartheid» para referirse a Israel y a su control de los territorios palestinos. Es la primera vez que esta organización con tres décadas de historia y dedicada a documentar los abusos en Gaza y Cisjordania decide aplicar este termino q era considerado tabú. Hasta ahora había definido ciertas políticas del Gobierno como cercanas al «apartheid», el régimen de segregación instaurado en Sudáfrica, pero no lo había usado de esta manera tan contundente.

B’tselem defiende esta decisión en un informe de ocho páginas en el que denuncia que el estado judío «no es una democracia a la que se le atribuye una ocupación, sino que es un solo régimen desde el río Jordán hasta el mar».

La organización piensa que después de setenta años de historia, el país se ha convertido en «un régimen basado en una política que consiste en promover y perpetuar la supremacía de los judíos sobre los palestinos». Fuentes diplomáticas de Israel reaccionaron de forma inmediata para calificar este informe de «propaganda» y rechazaron lo que consideran «acusaciones falsas basadas en un punto de visto ideológico, no en la realidad».

La oposición de Gantz

El ministro de Defensa de Israel y principal líder de la oposición, Benny Gantz, aseguró ayer sentirse «engañado» por Netanyahu, a quien haberle «estrechado la mano» ha sido una «equivocación», por lo que ha pedido unión al resto de formaciones políticas de cara a las próximas elecciones, según informó la agencia EP.

En mayo de 2020 el Likud y el principal partido opositor, Azul y Blanco, firmaron un acuerdo para formar un Gobierno de unidad en el que Netanyahu mantendría el cargo durante 18 meses, mientras Gantz ocupaba la cartera de Defensa, pasado ese periodo este último lo reemplazaría como primer ministro.

La decisión de Gantz provocó la salida de varias personalidades del partido, que ha visto caer su popularidad hasta tal punto que podría dejar de ser el principal partido de la oposición según las encuestas, llegando incluso a no lograr el umbral de votos necesarios para contar con representación en la Knesset, el Parlamento israelí.

Ver los comentarios
Fuente: ABC