Emmanuel Macron se trasladó la tarde del martes desde el palacio del Elíseo a la prefectura de Bobigny (Seine-Saint-Denis), en el corazón de la «banlieue», los suburbios más multiculturales de París, para presidir una reunión de trabajo excepcional de la Célula de lucha contra el islamismo y el repliegue comunitario (CLIR), con el fin de hacer un balance provisional y «relanzar» todas las operaciones judiciales y policiales de su gobierno movilizados contra la barbarie islamista.
Acompañado de su ministro del Interior, Gérald Darmanin, el presidente de la República, deseaba poner en escena la movilización total del Estado, sus instituciones, su sistema judicial y policial, al servicio de la defensa de la matriz cultural de la Nación, en la escuela, víctima de la barbarie islamista.
La movilización total del Estado francés fue presentada por el presidente Macron en estos términos: «No se trata de nuevas declaraciones. Hemos nombrado el mal, con palabras. Ahora se trata de explicar y desplegar nuestra estrategia. Varias decenas de acciones concretas se han lanzado contra las organizaciones asociaciones e individuos que intentan imponer el islamismo radical o destrucción de la República. Nuestra movilización total lo impedirá».
Trabajo judicial: el jefe del Estado subrayó a todos los equipos que trabajan en la lucha contra el islamismo, que el ministro de Justicia, Éric Dupond-Moretti, ha comenzado a trabajar en una legislación de urgencia llamada a perseguir las nuevas formas de incitación al odio a través de las redes sociales.
No menos capital, recordó Macron, las nuevas medidas que deberán agilizar la expulsión de sospechosos de radicalización, el cierre de asociaciones «culturales» y «religiosas» sospechosas de propaganda islamista.
A la espera de los interrogatorios de la docena de personas detenidas por complicidad con el asesino islamista que decapitó el viernes a un profesor, en Conflans-Sainte-Honorine, al oeste de París, el presidente de la República recordó a los equipos de trabajan más directamente en la lucha contra el islamismo, que la justicia tratará «con la máxima urgencia» unos casos cuyo proceso y sentencia debe ser ejemplar.
Por su parte, los miembros de la Célula de lucha contra el islamismo y el repliegue comunitario (CLIR) transmitieron al jefe del Estado y el ministro del Interior sus propias sugerencias «de base» para «mejorar» la próxima Ley en curso de elaboración para combatir judicial y policialmente el «separatismo islamista». Será, a principios de diciembre, la «cúpula» judicial e institucional del proyecto macroniano de lucha contra la barbarie islamista, en todos los terrenos.
Reafirmados los grandes principios de la lucha judicial contra el islamismo subversivo, Emmanuel Macron pasó revista y «apretó las tuercas» a las numerosas operaciones policiales en curso.
Cierre y registro de mezquitas
A la misma hora que Macron trabajaba, en Bobigny, con los miembros de la Célula de lucha contra el islamismo y el repliegue comunitario (CLIR), las fuerzas del orden precintaban la mezquita de Pantin, en el mismo departamento de Isla de Francia, otro de los grandes focos de acción del multiculturalismo islamista. Seguirán nuevos cierres, temporales y/o definitivos.
El presidente de la República confirmó el registro de otro medio centenar de mezquitas y lugares de culto, en el marco de una vasta operación sin precedentes de hostigamiento y persecución de sospechosos. Las fuerzas de seguridad del Estado han recibido la orden de «visitar» una o varias veces por semana las asociaciones religiosas y los lugares de culto, sometiendo a sus dirigentes a controles sistemáticos.
Tras una primera expulsión de 231 extranjeros en situación irregular, sospechosos de «radicalización», Macron anunció una reforma destinada a «agilizar» los complejos mecanismos burocráticos que han retrasado, en muchos casos, unas expulsiones que el jefe del Estado desea «más rápidas y urgentes».
Trabajando, en Bogigny, con jueces y policías de base, en una prefectura departamental, el jefe del Estado terminó su sesión de trabajo poniendo esas tareas urgentes en la perspectiva del marco general de la respuesta política e institucional contra la barbarie islamista: horas antes, la Asamblea Nacional había celebrado una sesión de homenaje a Samuel Paty, el profesor de geografía e historia decapitado el viernes, a quien se rendirá otro homenaje nacional, este miércoles, en la histórica universidad de la Sorbona.
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Fuente: ABC
