El Parlamento de Venezuela investiga a la empresa que gestiona las elecciones por posible fraude

El diputado Guillermo Palacios, miembro de la Comisión Permanente de Contraloría de la Asamblea Nacional, va directo en sus denuncias contra ExClé, la empresa argentina que ejerce el monopolio del sistema electrónico electoral venezolano desde hace siete años. Está previsto que también participe en las legislativas de diciembre, el ancla con la que el chavismo pretende aferrarse al poder.

Para empezar, llama la atención la inconsistencia numérica entre el Registro oficial de 20,7 millones de venezolanos del Consejo Nacional Electoral (CNE) y la de 35 millones de votantes del mismo registro que presenta ExClé en su página web, lo que evidencia una forma de delito, afirma el diputado en su entrevista con ABC, al subrayar que la población de Venezuela apenas roza los 30 millones de habitantes.

Con esa diferencia de 15 millones de electores «contaminados», «opacos» y «fantasmas», la empresa contratada por el CNE maniobra a favor de los candidatos chavistas y de Maduro para mantenerlos en el poder. «Siempre saldrán ganando en cualquier elección», señala el diputado, al mostrar los comicios efectuados desde 2004 con la vinculación de ExClé.

«Aquí ha habido duplicidad biométrica, es decir, se encuentran en el registro repetidos cantidades de electores y eso por supuesto perfectamente puede dar lugar a un fraude. Hay electores contaminados y en cualquier momentos pueden ser activados en la máquina de votar electrónica», afirma Palacios.

Otra irregularidad ocurrió hace dos meses en plena cuarentena. El padrón electoral era de 19,1 millones de electores y subió de repente a 20,7 millones de personas. Esos 800 mil nuevos votantes por cumplir 18 años de edad no se vieron registrándose en el CNE por estar confinados en sus casas durante la pandemia del coronavirus.

El fraude electoral es de tal magnitud con la lista cantada de los candidatos chavistas ganadores, que ya «es imposible» suspender las parlamentarias de diciembre, según Maduro. Sin embargo, la Asamblea Nacional, que preside Juan Guaidó, decidió iniciar la investigación y destapar la caja negra del sistema electoral también contra «viento y marea» chavismo.

La empresa argentina ExClé S.A. aterrizó en Venezuela en el 2003 de la mano de los Kirshner y Hugo Chávez. La fundaron los hermanos Carlos y Guillermo San Agustín. Tienen oficinas en Buenos Aires, Asunción y Caracas y se ocupan de los sistemas biométricos. Desde ese momento, el exministro Jorge Rodríguez se vinculó a los argentinos desde que era alcalde de Caracas y jefe del CNE. Hoy Rodríguez es el jefe del comando de campaña del chavismo.

La empresa ExClé tiene el monopolio y control absoluto del sistema electrónico electoral nacional en sus tres fases preelectorales, día de las votaciones con las máquinas y postelectoral, combinado con el biométrico de identificación de la huella dactilar. Con los capta huellas controla además toda la banca estatal, el carnet de la patria, la entrega de las cajas de alimentos «Clap», el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), el Biopago, la criptomoneda del Petro.

En el 2017, cuando la empresa Smartmatic se retiró del CNE denunciando que se había cometido un fraude con un millón de votos fantasmas en la elección de la Asamblea Nacional Constituyente que preside Diosdado Cabello. Entonces el CNE nombró a la empresa argentina ExClé para que la reemplazara.

El diputado considera que «hay una conspiración del régimen con sus organismos como el CNE, el TSJ, la ANC, todos están alineados para producir resultados favorables al régimen pase lo que pase y garantizar su permanencia en el poder, lo que violenta los derechos políticos de los venezolanos».

La empresa ExClé Forma parte de una corrupción generalizada que amerita una investigación para precisar las responsabilidades, añade. «Dada la determinación del régimen producir decisiones para desfavorecer a un sector que es mayoritaria de la población y eso es un delito», dice Palacios.

Entre los personajes que los parlamentarios van a investigar en la trama del CNE figura el militar Carlos Enrique Quintero Cuevas que integra la junta nacional con la rectora principal Indira Alfonzo Izaguirre, recientemente sancionada como corrupta por EE.UU., entre otros.

Por otro lado, el ex gobernador de Aragua, Carlos Tablante, exiliado en Madrid, también se ha sumado a las denuncias. «Todo huele a fraude en el CNE. La empresa argentina ExClé mantiene millonarios contratos con la cleptocracia madurista: Banco de Venezuela, Petro, Carnet de la Patria, capta-huellas, entre otros», dijo Tablante. Reveló a ABC que las 40.000 máquinas de votación chinas contratadas a 500 dólares cada una «tienen un sobreprecio», aún por determinar.

Ver los comentarios
Fuente: ABC