El incendio en el Valle Magdalena continúa activo y ya ha afectado una superficie de 23.131 hectáreas. Las condiciones climáticas han representado un desafío para los brigadistas, que trabajan en diferentes frentes para contener las llamas. La presencia de fuertes ráfagas de viento complicó las operaciones, obligando a replegar a las cuadrillas y medios aéreos.
Durante la tarde del domingo, se registraron precipitaciones en la zona afectada. Si bien la lluvia trajo cierto alivio al campamento base, aún no se ha determinado su impacto en la propagación del incendio. Las autoridades informaron que mañana se evaluará el estado del terreno y las posibles modificaciones en la estrategia de combate.
En el flanco izquierdo del incendio, los equipos trabajaron con herramientas manuales, líneas de agua y cortafuegos construidos con maquinaria pesada. En la zona comprendida entre el Cañadón de Caballada y la Laguna Verde, se avanza en la finalización de una línea de contención clave para evitar el avance del fuego.
En la cabeza del incendio y en el flanco derecho, las cuadrillas continúan enfrentando focos secundarios activos. Con apoyo de medios aéreos y equipos en tierra, se refuerzan las líneas de control en los sectores más críticos. La presencia de viento ha dificultado el trabajo, pero las tareas de extinción continúan.
El Comando Unificado del Parque Nacional Lanín y el Gobierno de Neuquén señalaron que el incendio sigue en actividad y que la situación depende en gran medida de las condiciones meteorológicas. La evaluación de las próximas horas será clave para definir nuevas estrategias de contención y protección de la zona.
Las autoridades han reiterado la importancia de la colaboración de la comunidad para evitar nuevos focos de incendio. Se solicita extremar las precauciones en áreas de riesgo y respetar las indicaciones del personal a cargo del operativo.
FUENTE: Minuto Neuquen
