Cada día que pasa, se suman nuevos datos sobre el polémico avión de origen venezolano-israelí que se encuentra retenido en suelo argentino desde hace más de una semana. Se trata de un Boeing 747-300 con matrícula YV3531 de la aerolínea de carga venezolana Emtrasur. Este miércoles se incorporó una información que agrava aún más la situación: la embajada de Israel en Paraguay ha sostenido que los tripulantes de la aeronave trabajan para Hezbollah. Concretamente, los acusan de traficar armas para la organización.
« En el avión que aterrizó en Argentina, se encontraban iraníes involucrados de forma directa en el tráfico de armas a Siria y a la organización terrorista Hizbolá del Líbano. Incluso, el capitán del avión es un alto ejecutivo de la empresa aérea iraní Qeshm Fars Air», aseguraba esta semana la embajada israelí en Paraguay a través de un comunicado oficial.
A continuación, el texto difundido por la embajada señala que «Israel está especialmente preocupado por la actividad de las empresas aéreas iraníes Mahan Air y Qeshm Air en América Latina, empresas que están involucradas en el tráfico de armas, equipamiento y personas para la Fuerza Quds y que se encuentran bajo sanciones estadounidenses por su vinculación con el terrorismo y en la proliferación de armamento».
Sobre el piloto
Al revisar el teléfono del piloto del avión que se encuentra retenido en Buenos Aires –concretamente, en el aeropuerto internacional de Ezeiza-, el iraní Gholamreza Ghasemi, se encontraron imágenes inquietantes. Según publica la prensa local argentina, en el dispositivo se hallaron fotografías suyas en las que se lo ve en calidad de combatiente de la Guardia Revolucionaria Al Quds. Entre las imágenes que figuran en el teléfono requisado al piloto del avión también figuran fotos de misiles, tanques de guerra y hasta de una bandera en la que se lee la frase «muerte a Israel».
Cabe recordar que el avión con 19 tripulantes —14 venezolanos y 5 iraníes— aterrizó la semana pasada en la capital argentina, luego de haber sido prohibido su ingreso a tierra uruguaya. Tras haber pasado unos días en Paraguay, en la Triple Frontera –en la que limitan Argentina, Brasil y Paraguay—, voló a Buenos Aires. Sus pasajeros se encuentran retenidos en el país sudamericano, mientras avanza la investigación sobre sus sospechosas actividades.
Sobre el accionar de los distintos países, la embajada israelí en Paraguay aseguró que «Israel considera que la postura firme de Paraguay y Uruguay representa un mensaje importante a Teherán para que no intente actuar en Sudamérica». Pero nada dijo sobre Argentina. Además, hubo otros países involucrados en el trayecto dado que, según las investigaciones, el avión cargó piezas de automóvil en México y se detuvo en Venezuela antes de aterrizar en territorio argentino.
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Fuente: ABC
